Un novio
Estaba el gato comiendo en la cantina cuando se le sentó al lado Murto y se le quedó mirando con sus ojos estrábicos. El gato le saludó y Murto bajó la mirada y se rió. Elia, que estaba sentada frente al gato, le miró, miró al gato, volvió a mirar a Murto y se rió a su vez.
- Que te he visto, Murto, que yo lo veo todo - y al gato - que ven a una chica guapa y se vuelven locos. Pero éso, ¡todos! no sólo él... - y se metió un trozo de carne en la boca, sonriendo y masticando a la vez con la boca abierta.
El gato se llenó el tenedor a su vez y se mantuvo ingiriendo ensalada a todo tren. Que con la boca llena no se habla.
Murto es un chico con un poco de minusvalía psíquica. Se le nota poco, pero tiene un carácter difícil, y como suele pasar en esos casos, se enamora mucho. Y el problema no es que mire, es que -he oído a alguna cocinera- después de mirar... le da por tocar.
Así que cada vez que lo ve, el gato se envara y espera que no pase de la reflexión a la acción.
Gustavo trabaja en el hotel también. Quiere ir al país donde comenzó la invasión alienígena para aprender el idioma. El otro día le dijo al gato que quería ir allí por unos seis meses, pero que luego querría volver; y entonces el gato le contestó que ya lo suponía, teniendo novia y piso recién comprado...
- Ni novia, ni piso... queremos venderlo...
El gato se rió y dándole una palmada en la espalda, le dijo "bienvenido al club y suerte".
Dos días después cruzaba el hall. Gustavo grita "¡Gato! ¿Estás muy ocupada?". El gato piensa que tiene algo que consultar, así que vuelve a cruzar el hall y se acerca al mostrador...
- Díme.
- Queeee... ¿Cómo estás?
- ¿Yo? Bien. ¿Qué querías?
- No, nada, preguntarte cómo estás.
- ... Pues... bien... ¿¿Tú estás bien??
- Sí, jejej.
- ...
- Queeeee...
- ...
- ¿Cuándovamosatomaruncafé?
- Eeh...
- ...
- ¿Fuera de aquí, te refieres?
- ¡Hombre claro!
- Pfffsshh... pues... cuando... quieras...
- ¿Te pego un toque al móvil?
- Pffsshhh... bueno.
- Vale.
- Este domingo y el que viene tengo planes, eso sí.
Y volvió a cruzar el hall. Es majo, pero... no. Además trabaja en la empresa. Además es un yogurín, debe tener por lo menos 5 años menos que ella. ¿¿¿Pero cómo osa??? Ahora que lo pienso, voy a desconectar el móvil de empresa. Y espero que no tenga el personal. Jo.
En la cantina, con Sbeerrow.
- Gustavo me ha invitado a tomar un café.
Sberrow se queda mirando al gato, se empieza a descojonar y dice...
- Vas a tener que escribir las cosas que te pasan. Ábrete un blog o algo, porque yo creo que a Caracartón también le gustas.
- Nooo.
- Sí, estoy segura, le pones. Te sueña vestida de cuero, con tacones y látigo ¡¡¡ Jijijij!!!
- ¡¡Noooo, puaaghh!!
- Sí, por éso la toma contigo, porque le pones, ¡¡¡jijijijijj!!!
Quizá tenga razón y me tengo que abrir un blog... Me está bien empleado por despotricar del amor en público.
De lo que estoy segura es de que ha llegado el momento de la verdad. Bueno, de la mentira: tengo que inventarme un novio. A partir de ahora tengo un novio muy alto y guapo. Y según con quién esté, adornaré a mi novio con las características de posesivo y violento. Tiene antecedentes penales, pero ahora está reformado y mi corazón le pertenece. Absolutamente.
13 comentarios:
jajajajajaaaa
bienvenida al club gato!!
no creas, no es divertido vender felicidad.... pero eso mejor que el acoso, en mi caso está clarinete que era un perturbado, pero oye.... y si pruebas?
un saludillo de mentira!
que no, que es coña... de verdad.
¿Y no será mejor buscarte uno de verdad? Que a partir de cierta edad queda raro tener amigos imaginarios.
Salud.
Jaaaaaajajaja.En fin, voto por el novio imaginario, yo ya dejé que metieran en la olla no se qué y mejor a tu bola.Besito
Jaja, mola el post, ¡¡pero el commentario de hacha no tiene precio!!
jaja, no falla, cuando no queremos ver a un tio ni en pintura, más se fijan en nosotras...
mujer, dale una oportunidad... los yogurines están medio atontaos (quiero decir, más de lo habitual), xo oye, para un ratín, tienen su gracia.
Neblina,aprenderé a mentir. Créeme que es lo mejor...
Mjjulieta, te invito a un cafe imaginario.
Céfiro, en este momento estoy enfadada con el género masculino en general y con algunos hombres en particular... Casi que lo dejo estar por un tiempo ;P
Hacha... si es que no tenemos remedio. Yo también lo sé...
Rebilated, tendrías que conocerla en persona... Nada de lo que aparece aquí es ficción. Y de Hacha, menos.
Corresponsal... hoy un alemán tipo frankenstain y muy simpático me ha regalado unas rosas arrancadas del jardín... Un camarero me ha hecho un te de naranja para mi resaca y me ha echado la culpa del calor... Así, con gracia, mola.
Pero el yogurín me mandó un mensajito el mismo viernes antes de que cortase el móvil y he hecho como que lo leía hoy por la mañana... A mí me van un poco más... ¿Maduros?
Pero no os preocupéis, pronto tendremos un breve cameo, recuperando viejos mitos sexuales de éste vuestro blog. Alerta, féminas, vayan colocándose los baberos.
Ya, si eso es precisamente lo que más miedo me da :D
¿Pero cómo se te ocurre descartarlo por ser un yogurín, Gato? ¿Pero tú no sabes que ellos se ponen calvos y barrigudos mucho antes que nosotras fofas y celulíticas?
Un poco más de vista, mujer... Yo le daría una oportunidad.
¡Un beso!
No demasiado posesivo y violento, que igual a alguno le da por convertirse en libertador de la causa femenina (para recolectar los beneficios a posteriori, claro). ¿Puedo sugerir como oficio guardia de seguridad?
"pronto tendremos un breve cameo"
Ahí, cameo no viene de cama, ¿no?
Mago, cameo no viene de cama. Una pena, una pena.
E- Martin, ¿yo me he metido contigo? :D
Antígona, me se caen las cannes ya. Pero bueno, creo que voy a darme la oportunidad de vivir conmigo un poquito.
Rebilated, no hombre, si es muy divertida...
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