viernes, 5 de enero de 2007

Presocrática


Si ya lo sabía yo. En cuanto me documento un poco, me doy cuenta de cuanta razón tengo. Lo que pasa, humildes mortales, es que no os enteráis de nada.
¿Pero tú tienes estudios, piltrafilla? Pues aplícate el cuento, que yo leo a Parménides lo mismo que Patapalo los tebeos:

"El Ser, única realidad, al cual ningún estado podría ser identificado, se distingue radicalmente del mundo de la apariencia, del devenir y de la multiplicidad. El Ser es, pero el No-ser no es. La diversidad de las manifestaciones visibles no es más que ilusión. [...] En esta resolución de la alteridad entre el Ser y el Pensamiento, y al otro lado de la apariencia engañosa del eterno movimiento del mundo, se perfila la certitud absoluta de que lo que subsiste se expresa, y que la esencia del mundo se reabsorbe en su intelección. "

¿Que qué significa?

Está clarísimo. Sobre todo la última frase. Para que el tío llegase a esta conclusión se pegó un viaje que te cagas y conoció a una Diosa, que le vino a decir poco más o menos "Ven acapacá, cacho de pardillo, que te lo voy a contar porque... porque estáis los de vuestra especie poco menos que amamonaos, con la cabeza hechita polvo de pensar contradicciones... ¡¡Ayyyy, que no voy a hacer carrera de tí!!" y todo eso se lo dijo la diosa de buen rollo dándole de capones en la cabeza,que se la dejó como un cartón de huevos, después de haber pasado de las tinieblas a la luz. La luz del sol, que entonces es cuando se iluminan las cosas.

Luego yo tengo razón. Porque cuando le da el sol es verde, y las sombras son azules... Ergo, Leoncio es verde, que es lo que la luz dice.


No me jodais el principio de identidad, y que os echen muchas cosas los reyes magos. Que a mí con que no me echen de casa me conformo.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Definitivamente, eres genialmente divertida. (Y cabezona).
En fin, que disfrutes muchos años de tu flamante Príncipe AZUL.

Anónimo dijo...

Pues qué quieres que te diga, ahora lo veo más azul que nunca...

Achab dijo...

¡Quiá! Parménides es un lila. Heráclito sí que sabe: todo cambia, nada permanece. El coche es azul y es verde, en realidad son infinitos coches, todos distintos. panta rei

Gato dijo...

Leoncio hace GRRRRR, que a él en la fábrica le dijeron que era verde real y está que ruge. Tan joven y ya con problemas de identidad,por culpa de la gente. Yo le consolaré llevándomelo por ahí, de picos pardos.

Achab, por dios bendito, que no sea nada más que uno, porque el seguro me cuesta un pastón y medio...

Anónimo dijo...

Gatoo, tu coche verde real es realmente azul.

Pero oye, yo más bien lo veo color 'agua de la playa de Formentor a las seis de la tarde un día de Reyes', que es un tono de lo más precioso.

Eres tan grande que creo que no cabemos las dos en el piso. Me voy a hacer las maletas.

Eva Luna dijo...

Querida Gato, no pasa nada por ser daltónica, tus lectores te queremos igual y Leoncio sabrá perdonarte cuando le llames Verderón con todo tu amor.

Tu fiel lectora, la de madriz

Gato dijo...

Qué majos sois. Es que me han timado, pero de fábrica. Y yo soy joven e impresionable. Constatad el nombre del color:

http://www.opel.es/action/go?page=new_astra_design&cntryCd=ES&langCd=es&webSiteId=GBPES#

Le cantaré "Chapa verdeeee, verde comooooo, la albahaca...!!"

Anónimo dijo...

En realidad, todo tiene que ver con la dualidad onda-corpúsculo propuesta por Louis de Broglie. Según con qué interactúe, se comporta como azul o como verde.
A falta de una explicación cuántica, claro.

Gato dijo...

Ya que te pones tan repelente, podías tirarte el moco y actualizar conocimientos...

Te paso fotos de Leoncio e ilustras la entrada, campeón.