Hipergilipollez postraumática
No lo hago porque quiero... lo hago... porque me aburro... Sí, estoy en un estado de idiotez permanente, y sufro violentos ramalazos de tontería justo antes de acostarme. Puede que sea la inhalación de los vapores de lejía, puede que sea el estrés de las últimas semanas... Yo me inclino por esta última explicación, y no entiendo porqué en un glosario de patologías psicológicas no aparece un trastorno como hipergilipollez postraumática. Creo que se sufre mucho -yo la he padecido miles de veces, al menos-.
El caso es que me he dado cuenta de que cuando me voy a lavar los dientes antes de dormir, tengo unas ideas completamente imbéciles. Hace dos noches, me los estaba lavando, y cuando terminé, desde el cuarto de baño, grité:
- ¡¡¡PERLII, PERLIIIII!!! ¡¡¡CORRE, VEN!!!
Tardaba un poco, y yo insistí. Entonces aparece en pelota picada en el cuarto de baño, con una camiseta encogida en el regazo.
- ¡Ah! ¿Pero te habías acostado?
- Sí, hija. ¿Qué te pasa?
- Que si cuando te lavas los dientes te miras en el grifo descubres a tu propio miniyo, como en Austin pogüers.
-...
- Jijij, buenas noches.
Anoche fuí a verla al ordenador, que tenía que entregar un interesantísimo reportaje sobre brillancicos mallorquines.
- Perli, Perli, que me estaba lavando los dientes y he descubierto que puedo hacer la cara que es una mezcla entre Amelie y Zapatero. ¡¡Mira!!- y sonrío retrayendo la barbilla y levantando las cejas.
- Estás fatal.
- Jijij, buenas noches.
10 comentarios:
Gato!! Porque yo te Iloveyou!!!!
Claro que si, hija, es un mal que yo padezco pero crónico, ni trauma necesito... nunca te he enseñado cómo muevo la barbilla???
Te lo enseñaré!
Jajajaj!!
Neblina, que estás invitada a la posada blogger de Mallorca, o a ver venaos en Graná... Con el movimiento de barbilla pagas el alojamiento y la pensión completa a base de tortillas de las de Huelga...
oh, cielos... Me siento como en Gran Hermano.
Coño, te pones a gritar: Perli, Perli!
y yo pienso: esta se me ha esmorrado en la ducha y se ha roto una pierna como poco.
Casi escupo el corazón por la boca del susto!
Te vas a enterar. Ahora cuando llegue a casa, actualizo.
Si quiere usted pasar un buen rato, vaya a Mallorca y adopte a Gato. Amenizará sus noches de invierno con variopintos números cómicos e imitaciones.
Perlita, en el fondo adoras que te saque de tu dulce tranquilidad.
Querida... desde fuera puede parecer divertido. Pero esto se soporta con cariño y estoicismo, no vayas a creerte.
Yo pienso ir, os pongais como os pongais, estoy haciendo entrenamientos de barbilla:
uno, dos, uno, dos!
Gatito! Yo muevo la nariz como la Samanta la de Embrujada!!!
No, ninguna habeis reparado en lo más importante del post
¡Perlita-En-Pelota-Picada!
¡Quiero una para navidad!
Lástima, porque ese era el único toque de ficción que Gato le ha dado al incidente.
Yo soy de las de pijama de felpa y bata de boatiné. Lo más parecido que puedas imaginarte a Isabel II.
Jajajaj, es que mi Perli es muy tímida, no me la ofusques, Emeá.
Be, karaoke, pitonisa y concurso de caretos. Esto va cada vez peor, juas juas.
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