viernes, 8 de septiembre de 2006

La paciencia de Ouwita.


Esta es una idea copiada de Quédate a dormir. Lo de levantar monumentos para agradecer cosas.

El caso es que yo tengo que agradecer a quién me aguanta. Así, como soy yo. Quien no se enfada a pesar de todo. Una cosa es que me conozcan y otra que me aguanten.

Y soy insoportablemente descuidada. Llamo poco-nunca a la gente. Recibo e-mails, SMS o llamadas perdidas que contesto mal, tarde o nunca. A pesar de ello hay gente que aún insiste. Que no se lo toman a mal. Que saben que soy gato, mala de llevar. Y a todos ellos -que no son pocos- les he de dedicar esto:


Como es grande lo he puesto en mi jardín y podéis venirlo a ver a casa, porque de transportarlo no me pienso ocupar y así tengo ocasión de ver vuestros cuerpecicos bonicos.


En concreto, y en esta ocasión, he de hacer una mención honorífica a mi querida amiga Ouwi, oriunda de Nerva, bonito pueblo de la geografía Onuvense. Nadie se sienta ofendido por que empiece por ella, pero es que... Nos conocemos desde hace ahora 11 años y atención:

NUNCA LA HE FELICITADO POR SU CUMPLEAÑOS A TIEMPO.


Siempre la he felicitado tarde, tardísimo. Es probable que algunos años no la haya felicitado. Por ejemplo ahora. Sé que su cumpleaños es el neeretantos de agosto y ya estamos en septiembre. Y yo sin llamar. Que me llevo acordando más de un mes, es verdad. Que no la he llamado, también. Y que después de 11 años me siga perdonando y me invite a ir a su casa y me ofrezca que su madre me borde un mantón de manila... Pues eso, que merece un monumento.

Muchas felicidades atrasadas, OUWI. Y un abrazaco gordo.

1 comentario:

Gato dijo...

A ver si consigo llamarte a una hora decente y hablamos un ratazo!!

Acabo de recibir un mail del astuto... ése sí que no se olvida de nadie. Está hecho un chicano, cuando escribe se le nota, jajaj

Un besote, y hablamos.
Y sí mereces el monumento.