lunes, 14 de agosto de 2006

Entremés

Los niños
El espacio escénico sugiere el rincón de un jardín. Al fondo se ve un decorado de troncos de árboles, delante del cual habrá un seto de arrayanes. El suelo es de tierra rojiza sobre el que descansa hojarasca de otoño. En el centro del escenario se sitúa un banco de madera pintado de verde oscuro.
Iván es un chico de unos diez años, moreno, delgado pero fibroso. Sus ojos pequeños y vivos suelen mirar de reojo a sus interlocutores; tiene los pómulos prominentes, la nariz rectilinea y un poco afilada, y los labios delgados.
Aliosha es su hermano, dos años menor, rubio y con rostro angelical: ojos grandes y claros, nariz menuda y labios carnosos.

(Ambos entran, hablando acaloradamente. Llevan las camisas desaliñadas por el ejercicio, los rostros arrebolados y parte del flequillo apelmazado en mechones y pegado a la frente por el sudor. Iván lleva un balón bajo el brazo. Se sientan en el banco, de frente, flexionando una pierna sobre el mismo)

ALIOSHA: ¡No es justo! ¡Los dos últimos balones eran muy altos y no podía pararlos de ningún modo!

IVÁN: ¡ Los dos han entrado en la portería, lo sabes perfectamente!¡Han colado justo justo por la papelera!

ALIOSHA: ¡Eso no es así, Iván; la portería llegaba HASTA la baldosa de la papelera, y los balones han pasado largamente por el extremo de la misma!

IVÁN: ¡ALEXEI FIODOROVICH! ¡ Sabes que soy mejor jugador de balompiev que tú, de aquí a Siberia, vamos!

ALIOSHA: ¡ Oh, cuánto tormento me produces, Vania, qué disgusto me das! ¡Creo que me encuentro mal!
-(se lleva el dorso de la mano a la frente)- ¡Por todos los santos y por el padre Zosima, creo que tengo calentura!

(Iván suelta el balón entre ambos y se apresura a poner la palma de la mano en la frente a Aliosha, mientras con la otra mano se toca la propia)

IVÁN: ¡¡BETUBÉ DEL MON!! ¡¡ SÍ QUE PARECE QUE TIENES FIEBRE!! ¡oh hermanito, luz de mi infancia, no enfermes por mi culpa! ¡Te regalo mi balón de reglamento! ¡¡Oh mísero de mí,
-(levantando la vista al cielo)- OOOHH ACIAGO DESTINO!!

BALÓN: ¿¿Podríais callaros de una bendita vez??

(Los niños se levantan como accionados por un resorte del banco, y Aliosha parece abandonar por completo su estado febril para entrar en el del asombro mayúsculo)

IVÁN: Pero...¡Cómo es posible
...!-(Niega con la cabeza)- ¡¡¡Esto no puede estar sucediendo...!!!

BALÓN: Si es que ya me tenéis cansado. Cada tarde, CADA TAAARRDE lo mismo. Que si ha entrado, que si no, que si no sabes jugar, que si qué malo estoy de pena, que si me desmayo... Y luego os coméis el trasero otra vez. Todo, porque no sois capaces de jugar como dios manda. Es muy simple... Primero, ponéis las reglas del juego, y luego... las respetáis.
¡¡Y ya está!!
¡¡ESO ES TODO!!

IVÁN:
(Con la voz temblorosa, de la impresión tan gorda que tiene encima) Pero... cómo es posible... Debe ser cosa de brujería... ¿Acaso... te hemos molestado con las patadas?

BALÓN: Pues mira tú al Robertocarleschenko... ¡que soy un balón, hombre, las patadas no me duelen!

(Los chicos se mantienen inmóviles y silenciosos de la estupefacción. De repente, Aliosha parece reaccionar. Hace amago de dar media vuelta para irse, pero inmediatamente vuelve a girarse hacia el balón)

ALIOSHA:
(Visiblemente contrariado. Por visiblemente contrariado, entendemos que pega saltitos zapateando sobre las hojas secas y formando a su alrededor una nube bajita de hojas como el humo del escenario de Maga, arrancándose los cabellos a puñados, al tiempo que la cara se le contrae con tics nerviosos en ojos y boca, que preceden a una catastrófica crisis de emoción de las propias de Aliosha que tanto preocupan de toda la vida a su hermano Iván y a su padre) Entonces... mientras creíamos jugar... ¿Eras tú quien dominaba el juego?

BALÓN:
(Se ríe ruidosamente. La risa va in crescendo, contrayendo sus costuras paulatinamente hasta el límite en que parece que va a sufrir una apoplejía de la risa, de esas que tanto han preocupado de toda la vida de dios a su madre. Al final, tras muchos esfuerzos, consigue dominarse y contesta, con la voz quebrada y risueña) No, jovencito; los jugadores siempre habéis sido vosotros. Solo es que, mientras jugábais... también yo me divertía...

12 comentarios:

Zagloso dijo...

Brutal la discusión entre hermanos. Me ha recordado a mí mismo y a mi hermanín. ¡Qué realismo!

Anómalo dijo...

Me sorprendes, Gato. Curioso, muy curioso.
Entiéndalo en sentido positivo, claro.

Misia dijo...

Por cierto, Gatito, no me he olvidado de lo del otro día... pero no he encontrado esa expresión de Pepe en ninguna parte. La que usan siempre los mallorquines es "Vatua el món sagrat!" o alguna equivalente con "vatua" (algo así como "voto a" pero sin ser fino ni antiguo. En este caso "¡voto al mundo sagrado!" pero en vez estilo alatriste, en plan payés).

Perlita de Huelga dijo...

Yo creo que es vatuvadell, pero tendría que consuultar a mis fuentes mallorquinas de pura cepa.
Esto... realmente curioso tu post. ¿Nos tomammos uunas cervezas esta noche y lo comentamos?

Gato dijo...

¿Por qué sorprendidos?
Siguiendo las coñas con Dostoyevski, decidí hacer un entre-més para entre-tener. Y si tú te peleabas así con tu hermano, Zagloso,-estoo, don Monotrema- vaya par de reviejos, tío.

Misia, es lo más fidedigno que me han dicho desde que empecé mis pesquisas. Y suena bien. Que la "u" evolucione hasta el sonido "v", y la "a" se pronuncie "e", es una buena explicación.

La de Pepe es una coña por la de redeu (redios o rediez), no la busques que no existe.

Recuperemos el castellano antiguo: hay que emplear la expresión "voto a..." que mola un huevo.

Perli, ya os comento: necesito que os acerquéis físicamente al restaurante, que estoy liada con la inauguración. Hoy tengo Calviá, Puerto de Alcudia y final en Marratxí. FFFFFFFFFFHH! Me vendría bien que me rescataseis un rato...

Zagloso dijo...

Aclaro, los vahimientos y los quejidos solían aparecer cuando nos habíamos peleado y mi hermanito había salido perdiendo. Los motivos de pelea solían ser igual de absurdos, de ahí el realismo.

Gato dijo...

Zagloso, me alivia tu aclaración... Es que los niños de Dostoyevski son siempre muy redichos...

Perlita de Huelga dijo...

Mi hermano y yo éramos mucho más sencillos: a puñetazo limpio. Cuando creció y me sacó una cabeza, opté por la escoba y las tijeras, cuando estaba de muy mala leche.
Cuando alcanzó los dos metros opté por perdonarle la vida. Soy así de samaritana.

Perlita de Huelga dijo...

Ah, por cierto, Gato. Esta noche voy a la inauguraicón de vuestro centro lúdico-gastronomico. No pienso probar bocado a mediodía.
Me lo voy a comer todo, todo y todo!!!!
Por cierto, vienen Gurú y cónyuge?

Gato dijo...

No, me temo que están de viaje. Y la contable. Y Xavi. Me cago en todo lo que se menea. En finnnn

Chirly dijo...

Me apunto virtualmente a la inauguración. Tomaos una a mi salud¡¡¡

Perlita de Huelga dijo...

Meri Chirla, como me tenga que tomar una por todos los que no están, voy a acabar con un coma etílico.
Pero haré lo que pueda...