viernes, 9 de octubre de 2009

Héroes

En un pueblo de Andalucía, de cuyo nombre no quiero acordarme, iba un gato con su BH azul, recién quitadas las ruedecillas, por la calle de su casa. El primer trayecto sin ruedecillas había acabado con una carretilla de albañil llena de piedras en el suelo, y no pasarían muchos días más antes de quedar literalmente introducida, con elemento de transporte incluido, en un seto alto de la plaza del ayuntamiento, por lo que huelga decir que la habilidad con la bici aún dejaba mucho que desear.

De repente unos chicos, tres o cuatro años mayores que ella, invadieron la calzada con aspecto amenazador.

- ¿Dónde vas, niña?- y con la pregunta bloquearon el paso.

Un gatín inexperto frenó de golpe, y hubo de echar el pie al suelo enseguida antes de acabar cayendo hacia el lado como una tonta.

- Ja. ja, que te vas a caeeer...

- ¿Qué queréis?

Molestar. Hacer una demostración de poder abusando de un mosquito. A saber. El caso es que entre risotadas cogieron el manillar de mi bici y empezaron a menearla para hacerme caer. Y un gato se iba poniendo colorada y se iba cabreando y asustando cada vez más.

Entonces sonó un derrape de rueda en la escena.

- ¡¡DEJADLA EN PAZ!!

Los chicos soltaron la bici y le miraron.

Era un chico castaño claro, un poco gordito y guapo de cara, que agarraba con prestancia su bici mientras increpaba a los aprendices de macarra:

- Es más pequeña que vosotros, metéos con una de vuestro tamaño.

Los chicos, enmudecidos, abrieron el paso. Y entonces se dirigió a mí.

- Si vuelven a meterse contigo, llámame, que yo te defiendo. Soy el Chache.

Y sin esperar a que le contestase, colocó el pedal de su bici y salió chiscando rueda como había llegado.

Yo me quedé mirando cómo se iba, sorprendida y agradecida. Me imaginé a mí misma cual heroína en apuros gritando "CHAAAACHEEEE!!!" y me resultó ridículo y me reí.

Pero aunque nunca más vi al Chache, aquellos niños no volvieron a meterse conmigo.

Me gusta pensar que la vida es de los héroes y de los valientes. Y haberlos, haylos, como las meigas, y si no miren qué suerte tengo recolectando hérues para mí...

4 comentarios:

Neo dijo...

Super Chache! jajaja todos los rateros huyen acojonados cuando el chache entra en acción. Su mero nombre ya les hace temblar, jajaja

Yo tengo superpoderes absurdos, nada útiles ni facilitadores de labores heróicas, jojo

mjjulieta dijo...

y no tienes curiosidad por saber qué fue del chache?? es tan sexy que te rescaten!!
un besito, gatito.

Gato dijo...

Neo, bienvenido! ¿Tú qué tienes? Yo tengo zumbido gátido, que no es infalible pero oye, algo ayuda...

Mjjulieta, me encantaría saber qué fue del Chache. Pero es que nisiquiera lo volví a ver, y mira que el pueblo no era demasiado grande...

Petulandcia dijo...

"que suerte tengo"..pues sí, Gato, aisss que cosas tan pototas que dice tu herue, pero por que tú lo vales, ea.
Enhorabuena!!