miércoles, 2 de mayo de 2007

Cosas que hacer en Londres

- Ir a ver el puente sobre el río ése gordo... éste... el que pasa por mitá de Londres... el Sena, coño, que no me salía.


- Perimetrar el castillo donde metían a los ladrones en una barca, ahí, a collejazos y encerraban a princesas o no sé que leches. Que me han dicho que tienen las marcas de tiza de los muertos sin barrer. Lo llaman torre, pero una torre debería de ser una torre y no un castillo. Los ingleses, que son muy así.

- Ver cómo te cierran las puertas del metro en tus narices. (Primera vez que dije: "Londres me acoge")

- Esperar durante una hora, después de que nos cerrasen las verjas de metro, a un autobús que no llega porque hay un incendio en Oxford Street. Pelados de frío, porque se levantó un viento glacial londinense especialmente encargado para mí que venía de mi isla calentita monísima de la muerte y sin abrigar.

- Ser expulsado por una mujer de la tribu de conductores de autobuses cabrones de London city, porque no había comprado el billete en una máquina que andaba escondida por algún sitio, y mirarla con cara de haber visto a un alien mientras cerraba la puerta de cristal con nosotros fuera, porque no iba a esperar a que lo comprásemos en medio minuto. (Segunda vez que dije: "Londres me acoge")


- Flipar al cruzar las calles, porque si miras al suelo, los ingleses escriben cosas como "Mira a la derecha", "mira a la izquierda", "despacio" y etc. Se conoce que en lugar de un código de circulación sientan las bases del tráfico por jurisprudencia, como en el sistema judicial. Curiosos los ingleses.



- Montarnos en un taxi medianamente decente (nos dijo tuenti pauns y nos cobró tuentiguan, calculó bien el tío) y cruzar todo Londres con el culo algo más caliente. Mientras, el amigo acogedor explicaba por dónde pasábamos sin que un gato hiciera ni puto caso. Sólo pensaba lo calentita que estaba en aquel taxi y el qué mala baba tenía la zorra del bus.


- Conocer la convivencia habitual en Londres: 5 compañeros de piso, dos italianos, una con mamma de vacaciones incluída y otro con novia griega amante de las grandes broncas, un español decente -mi amigo, claro-, un español gorrón, y un hindú o algo así, que no tenía problemas para dormir gracias al calibre de sus petardos. Cuando menos, entretenido.


- Beber café italiano, preparado por mamma italiana -hasta el azúcar me echaba en la taza, que me tenía avergonzada: "L’ospite è sacro"-, y escuchar historia medieval de la Cerdeña en una cocina londinense. Que es lo que tienen las cocinas allí.


- Ir a pelearse por un hueco con una pinta un viernes por la tarde, rodeada de ingleses desaforados por liberarse cuanto se han constreñido durante la semana.


- Practicar mi inglés chungo hablando del alma con un pakistaní igualico que José el Francés, todo relleno de cerveza en su interior. En realidad aún no sé si nos entendimos. Pero se golpeaba el corazón con el puño, más majo él...


- Mirar la flora londinense en los parques. Mirar la fauna londinense en los pubs. Deberían hacer safaris de esos con coches, para estar protegidos por un cristal.

- Asistir a una negociación con un taxi ilegal que quería timarnos. (Tercera vez que dije: Londres me acoge)

- Coger un autobús conducido por un psicópata en el que la gente se golpeaba con todo, asidos con dos manos a las barras, mientras el tipo aceleraba, adelantaba y frenaba en seco en las paradas como si aquello fuera un cacharro de feria. (Cuarta vez que dije: Londres me acoge)


- Comprar un regalo de la reina para la Perlita de my soul. No fue fácil; la pega era "no, no es suficientemente friki".



- Visitar la Modern Tate sin haber fumado porros y buscarle sentido a lo que ves. Os invito a hacerlo sobrios. Ya me contaréis. Valientes.


- Pasear por algún sitio en no sé donde y empezar a escuchar una famosa, legendaria canción de amor, - que quién la adivine se gana una cena en la Gata Perlada-, y descubrir que procede de éste coche:





¡¡Es un coche de novia!!

Lo conduce un tipo rapado, con pinta de segurata chungo, con gafas de sol. Yo pienso que es el coche de bodas de la Perli y empiezo a dar saltitos. Saco mi cámara y de repente un escalofrío me recorre la espina dorsal... El cachobestia éste, como haga una foto sin pedir permiso, igual me arrea una hostia en inglés, que deben de doler ésas, y me pone la cabeza giratoria como la niña del exorcista...

Mi amigo me socorre y me chivatea:

- Canai cheic a foto, pliiiiisss???

El matón me asiente y se aparta del coche. Y después pillo la inglesia también, para que veáis qué mona:


Hay que reconocer que para algunas cosas, tienen estilo. Lástima que vayan tan enfurruñados por la vida. Lástima que vivan tan lejos. Pero las iglesias y los coches los ponen muy monos.

Vocabulary:

Soul, Broder soul, fire in Oxford Street, Cheic fotos, tuenti pauns, cheap dress - mi vestido mágico, un valor seguro que no podía faltar en mi maleta-, risk of death if train is moving.

Otros aprendizajes: OSPITE. Si eres el ospite, que te pongan el café, te traten bien, te lleven la maleta por todo el metro y que te sigan tratando bien. Un lujazo. Hasta en Londres. A ver cómo se agradece éso.

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Jaja. A mí esas cosas que cuentas también me dejan pensando para mis adentros "anda que me van pillar en otra", pero hay quien dice que disfruta.
Me alegra que te prodigues más por aquí. Se te echaba de menos. (¿lo había dicho ya?)

Anónimo dijo...

Gato, Gato, me encanta ese cadillac!!!!

¿Y no puedo participar en el concurso de la canción nupcial? Jo.

Zagloso dijo...

¿La canción es el Cadillac Solitario?

¿La de Dirty Dancing?

¿Everything i do i do it for you?

Gato dijo...

Zagloso, ¡¡¡No!!! pero gracias por participar. Legendaria es legendaria. Y daré pistas si os ponéis torpes.

Perli, tú no vales que te la canté. Y no vale filtrar información, perriodista.

Martinez, un placer estar de nuevo por aquí. Y sí, sarna con gusto no pica... O tengo una vena masoca. Claro que después de ver Secretary le entran ganas a una...

Gato dijo...

Perlita, vaya pandilla de cabrones. Como saben que cualquiera que llega a casa es bien recibido y le damos de comer, pasan de adivinar la canción. Perros del infierno.

Pues salía en corazón salvaje.
Jo.

Be dijo...

Hoy me he despertado con la sensación de que era Love Me Tender, no sé con qué habré estado soñando.

Be dijo...

Gato. Acabo de mirarlo y Love Me Tender sale en Corazón Salvaje. Estoy alucinando. ¿Es?

Gato dijo...

¡¡¡PREMIO!!!

Premio para la señorita Be, que no le hacía falta ganar el concurso para cenar en casa, pero bueno.

La gran, gran canción que sonaba era Love me tender... pensamos que quizá habían grabado 500 veces lofmetender en el cedé, pero después empezó a sonar Now or never...

Mola, ¿eh?

Be dijo...

Yupi!!! (ha sido magia)

Gato dijo...

Culturilla general, ése referente no es chungo...

Be dijo...

La magia es que me desperté iluminada. Fue la primera cosa que pensé el sábado por la mañana: "va a ser love me tender".